El aceite vegetal de rosa mosqueta es uno de los más apreciados del mercado por sus conocidas propiedades como cicatrizante. Su alto contenido en ácidos grasos esenciales linoleico y linolénico le proporcionan una alta actividad como regenerador de la piel. Favorece la síntesis de colágeno, por lo que su uso continuado mejora la apariencia de las cicatrices haciéndolas casi imperceptibles. Proporciona elasticidad y flexibilidad a la piel.
COMPOSICIÓN CUALITATIVA
ACEITE VEGETAL ROSA MOSQUETA (ROSA RUBIGINOSA
ACEITE ESENCIAL LAVANDA (LAVANDULA ANGUSTIFOLIA)
ACEITE ESENCIAL NARANJA AMARGA (CITRUS AURANTUM AMARA)
ACEITE VEGETAL HIPERICO (HYPERICUM PERFORATUM)
ACEITE ESENCIAL PALMAROSA (CYMBOPOGON MARTINII)
PROPIEDADES
El aceite vegetal de rosa mosqueta es uno de los más apreciados del mercado por sus conocidas propiedades como cicatrizante. Su alto contenido en ácidos grasos esenciales linoleico y linolénico le proporcionan una alta actividad como regenerador de la piel. Favorece la síntesis de colágeno, por lo que su uso continuado mejora la apariencia de las cicatrices haciéndolas casi imperceptibles. Proporciona elasticidad y flexibilidad a la piel.
Las propiedades del aceite esencia de Lavanda son múltiples, entre ellas el ser muy analgésico y un potente cicatrizante. Regenera la piel de forma espectacular, de manera que una piel muy agredida, como tras una quemadura, se verá totalmente renovada tras el uso continuado de este aceite. Sus propiedades antisépticas y antibacterianas debidas al linalol su principal activo, desinfecta la piel dañada y ayudan a acelerar el proceso de cicatrización.
El aceite esencial de naranja amarga tiene efecto antiinflamatorio, cicatrizante y regenerador cutáneo, actuando en sinergia con el resto de los componentes de este preparado para aumentar el beneficio de su uso.
El aceite vegetal de hipérico es descongestionante, analgésico y tiene actividad antiinflamatoria, es cicatrizante y calmante de las quemaduras incluidas las solares al igual que la lavanda. Debido a estas propiedades es un magnífico vehículo para guiar al resto de los aceites incluidos en este preparado.
El aceite esencial de palmarosa es ideal para favorecer la regeneración de los tejidos cutáneos, aportando además un extra de hidratación muy necesario en este proceso Como antibacteriano y estimulante inmunitario colabora en impedir la proliferación de gérmenes en la piel lesionada.
¿CUÁL ES SU USO?
Este aceite es ideal para el tratamiento de lesiones en la piel que tras una herida deban pasar por un proceso de cicatrización, favoreciendo esta y permitiendo la regeneración del tejido lesionado.
En todos los casos en los que se necesite regeneración tisular, como heridas, quemaduras, llagas, ulceras, escaras, eccemas, heridas quirúrgicas y cicatrices derivadas del acné reciente Los resultados son apreciables a los pocos días de iniciado el tratamiento.
En caso de quemaduras, el efecto analgésico se aprecia al minuto de su aplicación. Como aceite de belleza, es un perfecto regenerador en caso de pieles que necesiten un tratamiento de choque para mejorar el estado general de la piel.
MODO DE EMPLEO
Aplicar directamente sobre la zona a tratar una pequeña cantidad, extendiéndola con la yema de los dedos hasta quedar completamente cubierta. Realizar un ligero masaje para favorecer su penetración Repetir el proceso dos o tres veces al día (mediodía y noche) durante el tiempo necesario para conseguir el resultado deseado.
PRECAUCIONES
No exponerse al sol después de la aplicación del producto. No recomendado durante el embarazo.
OBSERVACIONES
La textura y el aroma son los propios de los aceites componentes del producto, no habiendo sido alterados con ninguna sustancia artificial.